Sesiones de Fotos

Con el paso de los años, que cuando veas sus fotos, recuerdes cómo era tu bebé. Cómo se reía, su cara de pillo o esos gestos inocentes y risueños, sus primeros dientes asomando y, sobre todo, que recuerdes cómo te miraba. El primer año lo recordarás siempre con un cariño especial y nosotros queremos ayudarte a atesorar cada detalle.

En eso consisten nuestras sesiones infantiles. En captar la magia de cada niño, que sólo vosotros los papis conocéis. Captar ese instante de juego, de risas, su inocencia.

Empezamos a realizarlas a partir de que tu bebé se mantenga sentado, en ese momento es cuando está descubriendo el mundo y tiene la mirada del “¡Mira lo que hago yo solito!”. Todo es una sorpresa para ellos y salen unas fotos súper especiales.

Esta es nuestra recomendación, para obtener un reportaje completo y variado, pues antes, al tener el músculo ocular muy débil aún da la sensación de que bizquean; además al no mantenerse sentados solitos, aunque lo consiguiéramos con alguna ayuda (trucos de fotógrafos ;D) todas las fotos serían muy similares pues no son capaces aún de interactuar con los demás y no llegan aún a tener el amplio abanico de gestos que tanto nos gustan.

Aún así, si necesitas realizar las fotos ya de ya porque quieres preparar con ellas los recordatorios para su bautizo, háznoslo saber y le prepararemos el atrezzo más seguro, a la vez que bonito, para su edad. Si sólo querías unas poquitas con el traje, os recomendamos que consultéis nuestras sesiones de seguimiento. En ellas, podemos aprovechar una de las sesiones con la ropita del bautizo y programar el resto del reportaje de seguimiento hasta su primer cumple y tienes así un recuerdo de lo más completo de su primer añito.

La duración de la sesión la adaptamos a cada bebé, teniendo siempre en cuenta su edad y si es más o menos inquieto. Suelen ser sesiones cortitas pues se cansan muy rápido de hacernos caso a los mayores. En estas sesiones pueden también salir los papis y los hermanos mayores.